River Plate debuta con goleada frente a Quilmes y se sube a la cima de su grupo
Buenos Aires, Argentina. | EFE |
River Plate fue una tromba imparable para el 'Cervecero', sobre todo en la segunda mitad, cuando el cuadro visitante se quedó con diez por la expulsión de Braña. Marcaron por partida doble Mora y Martínez, y Alario remató la faena, pese a que su gol no debió subir al marcador.
El 'Millonario' se estrenaba en este campeonato en casa, ante su público, ante un Monumental hasta la bandera, y los de Gallardo cumplieron con creces con el papel de favoritos. El partido debió jugarse ayer domingo, pero fue aplazado por las fuertes lluvias.
La primera mitad fue muy distinta de la segunda. El encuentro fue muy igualado, con ocasiones para ambos conjuntos. Conforme avanzaba el cronómetro, River comenzó a tener más posesión del balón, y pasado el primer cuarto de hora, su dominio era claro.
En esas llegó el penal cometido sobre Alario, un dolor para la defensa rival todo el encuentro. Rodrigo Mora lo lanzó, pero Walter Benítez se lo detuvo. Sin embargo, el arquero de Quilmes se había adelantado claramente al lanzamiento, y hubo de repetirse. A la segunda Mora no falló, pese a que Benítez volvió a adelantarse.
Con el 1-0, Quilmes reaccionó, y se volcó sobre la meta de Barovero. El gol terminó llegando en una jugada enrevesada. El balón le cayó a Romero, solo en el segundo palo, y anotó el tanto de la igualada.
El encuentro parecía encaminarse al descanso con 1-1 en el marcador, pero un zurdazo escandaloso de Gonzalo Martínez, imparable para Benítez, rompió la igualada por segunda vez.
Quilmes no se repuso de este mazazo, y la segunda parte fue franjirroja de principio a fin. Martínez marcó el tercero en la reanudación, a pase de Bertolo, y Mora también anotó su doblete particular trsa recoger un balón dentro del área visitante y rematarlo a gol sin oposición.
Además, Quilmes se había quedado con 10 por una fea entrada de Braña sobre Martínez cuando éste se marchaba sólo por la banda hacia la meta rival. Con el partido decidido, llegó el quinto, pese al claro fuera de juego de Iván Alonso en el pase de Bertolo, que en realidad fue un tiro que Benítez rechazó. El balón le cayó a Alonso, quien no pudo controlarlo y Alario la empujó a gol.
Restaba cuarto de hora por jugarse, pero estaba todo dicho ya. River la siguió buscando, y pudo haberse convertido en una goleada humillante, pero la relajación lo evitó.
Comienza el campeonato River con victoria. El domingo que viene, River Plate visitará a Belgrano, en Córdoba, por la segunda fecha del campeonato.
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