Real Madrid se queda con Trofeo Bernabéu al vencer al Milan


Asensio celebra un gol con el Madrid. Foto EFE
Madrid, España. (Agencias) - La presentación oficial del Real Madrid con Lopetegui en el banco ante la afición, tenía este año un invitado de lujo como el AC Milan. Un total de 20 Copas de Europa se daban cita en el Trofeo Santiago Bernabéu para una puesta de largo que además servía como última prueba para los blancos antes de la Supercopa de Europa ante el Atlético. El once del nuevo entrenador merengue, con la presencia ya de los mundialistas excepto Modric y el recién aterrizado Courtois, dejaba entrever que el vasco quería realmente tomarse el encuentro en serio.
No hubo tiempo para sentarse y descansar en el estadio madridista. Apenas había comenzado el encuentro cuando Benzema ya celebraba el primer gol del encuentro. Bale y Carvajal se combinaron para que el lateral pusiese un centro medido al área chica, donde apareció el francés para rematar de cabeza.
No tardó en reaccionar el Milan. Antes de caer en la lona por el gol, se apoyó en las cuerdas para asestar un golpe a la defensa blanca. Borini, escorado, lanzó a portería pero el tiro fue repelido por Navas. Higuaín lo recogió en la frontal del área y la colocó lejos del portero costarricense.
Pero una cosa era la mente y otras las piernas en un ritmo de guerra excesivo para un partido de verano. Solo las actuaciones de Keylor Navas y Donnarumma evitaban que cayeran más goles en el Santiago Bernabéu.
Destacaban también Asensio y Bale, dos de los hombres llamados a dar un paso adelante en un Madrid que está aprendiendo a vivir sin Cristiano. El encuentro estaba bonito y era agradable para el aficionado, acostumbrado a espectáculos sin chicha ni emoción en estas fechas.

Benzema anotó el primer gol. Foto AFP
Cuando el partido parecía abocado a marcharse con empate en el marcador al descanso, apareció Bale. El galés aprovechó el mal despeje de la defensa para fusilar, desde el área chica, a un Donnarumma que solo pudo tocar la pelota sin desviarla.
El Real Madrid apenas sufrió en la segunda parte. El Milan perdió fuelle a la vez que lo hacía Suso, principal timón de los de Gattuso. Entró también Vinícius, que está llamado a dar grandes tardes en el Bernabéu.
Los aficionados ya rozaban el pensamiento de quedarse para despedir a su plantilla o marcharse rápido para evitar atascos. Los que hicieron lo segundo se perdieron el último tanto del encuentro, obra de Borja Mayoral. El delantero aprovechó el tiro de Modric, repelido por Donnarumma, para cabecear a placer y poner el 1-3 en el marcador.