Buenos Aires, Argentina. (HSI) – Boca festejó su 35ta consagración como campeón del torneo de liga en su estadio La Bombonera tras empatar 2-2 con Independiente.
Y contó con la ayuda de su acérrimo rival, River Plate, que superó agónicamente 2-1 a Racing Club, el equipo que llegó a la última fecha peleando el título con el Xeneize.
Sin este triunfo, hoy Racing sería campeón y Bica estaría de manos vacías
Entiendo si hay hinchas de River enojados, pero hoy respetamos nuestros valores y lo que somos. Resguardamos nuestra dignidad. Estoy contento y orgulloso de sentir eso, más allá de haber beneficiado al clásico rival. Es paz interna. De lo demás no se vuelve”
✍️ Marcelo Gallardo
De local en su estadio Cilindro, Racing dispuso de la oportunidad para irse al frente a los 90 minutos con un remate de penal.
Franco Armani, el arquero de River, el atajó el disparo a Jonathan Galván y la historia desde allí cambió.
En la cancha xeneize, Leandro Fernández abrió el marcador de penal para los visitantes a los 31 minutos.
Boca supo darle la vuelta mediante un cabezazo de Guillermo Pol Fernández a los 33 y el disparo de tiro libre del colombiano Sebastián Villa a los 49 minutos.
Independiente decretó el empate con el tanto de Javier Vallejo a los 80 tras un córner y los nervios se apoderaron de la Bombonera.
Boca quedó pendiente al desenlace en la cancha de Racing, donde el doblete de Miguel Borja en los últimos 15 minutos le dio la victoria a River y acabó con las ilusiones del equipo local.
También fue el último partido oficial de Marcelo Gallardo como técnico de River.
Así las cosas, Boca Juniors hoy debe agradecer a su archirrival que viva sus valores de fair play deportivo para poder celebrar.
