Moscú, Rusia. (Agencias) – Perú cierra de forma mas que digna una Copa del Mundo que le quedó debiendo. André Carrillo y Paolo Guerrero le dieron algo de lo que esta selección inca debió llevarse a casa: goles, triunfo y el reconocimiento mundial a su presentación después de 36 años de ausencia.
Perú lavó el alma el día de su despedida del Mundial de Rusia en una función de nostalgia en la que Paolo Guerrero, que tantas instancias recorrió para regatear un castigo por dopaje, inventó la jugada para el gol de André Carrillo y firmó el suyo para vencer por 0-2 a Australia en Sochi.
El de este martes fue un partido que Australia necesitaba ‘ganar o ganar’ para postular su candidatura desde el Grupo C para los octavos de final, y los de Ricardo Gareca encararon como una final para marcharse con una victoria en las alforjas y algunos goles.
Australia tenía la obligación de conseguir los tres puntos, para tener la última ocasión de meterse en los octavos de final de la cita mundialista, pero Perú escogió la peor tarde de los australianos para celebrar su primera victoria.
Pese a que Australia lideró siempre en el dominio del balón, nunca llegó a hacerlo en el marcador, rendido a los pies de una Selección Peruana muy ofensiva a la par que eficaz en sus ocasiones.
Tras una buena jugada de ataque adornada por la gran asistencia de Guerrero, la enganchó de primeras Carrillo para reventarla con la diestra y superar sin problemas al guardameta rival, un Ryan que no pudo hacer nada más que verla entrar como un misil.
Golazo del de Lima para hacer historia, para anotar el primer tanto peruano de este Mundial y, lo que es más importante, el primero de Perú en la competición internacional después de 36 años.
Tras estar a punto de quedarse fuera del Mundial, tras sufrir partido tras partido por no poder encontrar portería, tras intentarlo una y otra vez, Paolo Guerrero consiguió su ansiado gol en el Mundial, un tanto que subió al marcador cinco minutos después de que el colegiado del encuentro indicara el comienzo de la segunda mitad del partido internacional.
Los de Ricardo Gareca se lanzaron hacia el área rival con el balón en su poder, tirando de velocidad y contundencia. En tierra australiana, Cueva le dejó un balón impecable al delantero peruano, para que superase sin problemas al meta rival.
Ambas selecciones se despiden del Mundial con la cabeza muy alta, los de Gareca como terceros de grupo con tres puntos y los de Van Marwijk últimos con un punto de oro.
