La Coruña, España. | EFE |
El Barcelona asentó su liderato en Riazor con una exhibición de efectividad ante el Deportivo. Los de Luis Enrique marcaron todo lo que fallaron en las últimas jornadas y no pasaron apuros en su primer partido de cierta importancia hacia el título.
Un fastuoso partido de Luis Suárez, que marcó 4 tantos y dio 3 asistencias, le bastó al Barcelona para sumar tres puntos vitales, aunque la sensación general que quedó tras el choque es la de que los azulgranas estuvieron algo mejor contra el Valencia.
Pero ante el Deportivo tuvieron todo lo que les había faltado en las últimas fechas: pegada y suerte. Pegada porque Luis Suárez adelantó a los suyos casi en la primera que tuvo: el charrúa empujó el balón a la red en un córner e hizo más fácil la vida a los de Luis Enrique.
Y también suerte, porque el Deportivo dispuso de dos ocasiones clarísimas en las manos de Celso Borges, quien se vino totalmente abajo ante un dubitativo Claudio Bravo y no pudo hacer el empate.
-Demasiado Luis Suárez-
El que sí se engrandeció en el partido fue Luis Suárez, que antes del descanso aprovecharía un fantástico pase entre líneas de Messi para batir a Manu y encarrilar la victoria.
Tras el descanso, el Barcelona se desató y volvió a mostrar la versión de comienzos de temporada. Casi nada más sacar de centro, Suárez encontró a Rakitic y el croata voleó a la red solo en el segundo palo.
Los azulgrabas disfrutaban a la contra y el propio Suárez hizo el cuarto tras un nuevo pase maestro de Leo Messi.
Y, lejos de buscar cerrar fisuras y firmar el 0-4, Víctor se lanzó al ataque en busca del tanto del honor y regaló por completo la última media hora al Barça.
En ella, además de divisar una posible polémica entre Luis Enrique y Suárez, que pareció negarse a una sustitución, el Barcelona firmó el quinto, anotado también por Suárez tras un regalo de Neymar, el sexto, marcado por Messi a puerta vacía a pase del uruguayo, el séptimo, todo un golazo ‘a lo Beckenbauer’ de Bartra, y el octavo, anotado a puerta vacía por Neymar.
No tuvieron esta vez los azulgranas la piedad que sí tuvieron con los gallegos el año pasado y descuentan un partido en su camino hacia el título. Este Dépor puede dar las gracias de tener ya los deberes hechos, pues acumula 1 triunfo en 17 partidos.
