En un juego que no debió jugarse hoy, UEFA, el arbitraje y el AS Mónaco vencen al Dortmund
Dortmund, Alemania. (AGE) – El aplazamiento de solo un día por parte de la UEFA, después de lo que hoy se consideran actos terroristas, ha pesado claramente mucho más al Borussia que al AS Mónaco.
Thomas Tuchel pidió más descanso para los suyos, para superar el susto, pero no se concedió por parte de los manda más de la UEFA. Quizá otro gallo hubiera cantado de haber ocurrido lo lógico, pero ahora al Borussia Dortmund le toca ganar con solvencia en el Principado.
Los errores han pesado demasiado a los de Tuchel. Los suyos por un lado, pero los del árbitro también, pues Orsato no estuvo nada fino, sobre todo en la primera mitad.
El Borussia dominó el partido desde el principio. Largas posesiones para encontrar los huecos en el muro que había levantado el Mónaco. No aparecían, y de cuando en cuando se perdía un balón que propiciaba una contra.
En una de esas llegó la primera jugada polémica. Penalti de Sokratis sobre Mbappé que el colegiado italiano sanciona con la pena máxima. No parece que fuera, pues hubo contacto pero no para tal derribo.
Lo fue a tirar el infalible Fabinho. Cogió carrera y… Al decimoctavo lo falló. Había metido los 17 anteriores, pero éste, quizá por el ‘karma’, lo mandó desviado.
Eso sí, la jugada había metido el miedo en el cuerpo al Borussia, y en lugar de aprovechar la decepción monegasca, propició una nueva contra que culminó Mbappé.
Recuperación, conducción y pase geniales de Bernardo Silva para Lemar. Centro de éste y Mbappé remató con el muslo a gol. Se encontró con un balón que no esperaba, pero hasta eso lo hizo bien. Sin embargo, el gol no debería de haber valido. El prodigioso jugador galo estaba en fuera de juego. Segundo error que penaliza, esta vez gravemente, al Borussia Dortmund. Ningún árbitro se dio por enterado del claro fuera de juego del francés.
Lo peor estaba por llegar. Un nuevo centro desde la izquierda, éste de Raggi, que quiso rematar Falcao pero al ‘Tigre’ se le adelantó Bender. Eso sí, su despeje batió a Bürki. El horror.
Con el 0-2 se fueron al descanso. Un resultado terrible para los de Tuchel, sin duda. Había que hacer cambios.
Y los hizo. Entraron Nuri Sahin y Christian Pulisic, y Tuchel acertó de lleno. Entre Guerreiro por la izquierda y el recién entrado Pulisic por la derecha torturaron al Mónaco durante toda la segunda parte.
El ansiado gol llegó a la hora de juego. Oxigenó hacia la banda Sahin, centró Guerreiro, toque de tacón de Aubameyang, pase de la muerte ante Subasic de Kagawa y gol de Dembélé.
El Borussia creyó en el empate, e incluso en la remontada. Un nuevo error, otro más, éste de Piszczek, propició que Mbappé se volviera a Mónaco con un doblete en su haber.
Pero el conjunto alemán no bajó los brazos. Al menos, no todos sus jugadores. Kagawa se inventó un jugadón en el área y recortó de nuevo distancias. Tuvo Aubameyang el empate en un remate de cabeza, pero Glik le importunó lo justo.
El Mónaco sufrió los cinco minutos más el descuento que le restaban. Sufrió mucho. Se encerró, pero aguantó. Se lleva al Principado un valiosísimo triunfo, pero hay que jugar la vuelta donde seguramente veremos una mejor versión del Dortmund que hoy lució aún sumamente afectado por los hechos violentos de ayer que le costaron no contar con Marc Bartra.
Porque estos equipos han seguido el guión previsto. El control del primer cuarto de hora de juego fue un espejismo. Atacan mucho y defienden poco, y por tanto, un gol o dos en el Louis II de Mónaco parecen garantizados.
