Diego Godín (Uruguay) y Filipe Luis Kasmirski (Brasil): El técnico argentino Diego Simeone suplió la baja del uruguayo José María Giménez con el joven francés Lucas Hernández, que una vez más cumplió con creces. Los otros tres de la línea defensiva estuvieron como acostumbran: siempre atentos a los marcajes y en las ayudas a los compañeros. El charrúa Diego Godín tuvo varios choques con su compatriota Luis Suárez, y en uno de ellos el ‘9’ golpeó al defensor rojiblanco con el codo en su ojo, acción que le costó la cartulina amarilla al ex del Liverpool. En el carril izquierdo, mención especial merece Filipe Luis, que a falta de cinco minutos para el final robó una pelota a Sergi Roberto y recorrió toda la cancha hasta pisar el área rival, intentar asistir al francés Antoine Griezmann y provocar un penal, porque Andrés Iniesta cortó su asistencia con el brazo dentro del área. Si las lesiones les respetan, ambos estarán defendiendo el arco de Jan Oblak en semifinales.
Luis Suárez (Uruguay) y Neymar Jr. (Brasil): El doblete del atacante uruguayo en el partido de ida, le dio una ventaja al FC Barcelona que antes del descanso vio cómo el Atlético de Madrid la remontaba. En esos primeros cuarenta y cinco minutos de partido, la MSN estuvo casi inédita en ataque, especialmente el ‘9’ blaugrana, que hasta el minuto 64 no disparó por primera vez al arco rival. En el caso del brasileño, la situación fue similar, ya que su acción más destacada con cierto peligro para los intereses azulgranas llegó en el minuto 41, con un disparo desde fuera del área que Jan Oblak atrapó sin problemas. La falta de acierto de ambos se transformó en desesperación en los minutos finales de la segunda mitad, algo que les costó la cartulina amarilla a los dos en diferentes acciones del partido: la de Neymar al golpear a Juanfran Torres ya fuera de la cancha en el 76 y la de Luis Suárez por un codazo a Diego Godín en el 69.
Douglas Costa (Brasil): Una de las armas más efectivas en ataque con las que cuenta el Bayern Múnich es el atacante brasileño. Pep Guardiola, consciente de ello, juega con esa baza cambiando de banda a su jugador más incisivo por el extremo. Sus centros e internadas en la primera mitad no tuvieron excesivo peligro, algo que en la segunda mitad subió de nivel con el Benfica buscando un segundo gol que le diera opciones de remontar la eliminatoria. En el 55, con 1-2 en el marcador a favor de los alemanes, el brasileño se quedó sólo en un mano a mano ante el arquero Ederson Moraes, que estuvo muy rápido para arrebatarle la pelota a Douglas Costa cuando éste controló mal. El ’11’ buscó su gol cinco minutos después, pero no lo encontró porque su disparo cruzado, tras desbordar a un defensa, se estrelló en el palo.
Anderson Talisca (Brasil): El Benfica soñó fuertemente con las semifinales hasta el gol del empate de Arturo Vidal, ilusión que acabó de destrozar Thomas Müller en el 52 al anotar el 1-2. Con ese marcador entró Anderson Talisca a la cancha, en el 68, sustituyendo al argentino Eduardo Salvio. En el minuto 74, una falta sobre Raúl Jiménez a escasos centímetros del área, se la adjudicó el joven brasileño de 22 años que, con un precioso golpeo con bota izquierda, superó la barrera y firmó el 2-2 definitivo de libre directo. En la que fue su quinta y última participación en esta Champions League, el ’30’ del equipo luso consiguió anotar su segundo tanto.
rgg / AFP
