París, Francia. (EFE) – Un gol del delantero francés en el último minuto permite a los de Deschamps salvar otro mal partido y alcanzar los octavos de final. Albania mereció el empate tras un gran encuentro.
Francia tiene flor. Y eso, en un torneo de estas características, vale mucho. De momento, unos octavos de final para un equipo que no ha estado a la altura de las expectativas, pero que ya ha superado el trance de la fase de grupos.
No fue superior a Rumanía y hoy tampoco lo ha sido ante una Albania que superó los nervios del debut y puso contra las cuerdas a la anfitriona.
El Velodrome estuvo intranquilo toda la noche. Giroud no la metía ni con calzador y Francia sufría en defensa ante el ordenado ataque albanés.
Al descanso, tímidos pitos acompañaban a Deschamps, que en un ataque de entrenador había dejado a Pogba y Griezmann en el banquillo.
Al primero, lo metió tras el paso por vestuarios. Salió con ganas el centrocampista de la Juventus, que se las tuvo tiesas con el césped. Le imprimió intensidad al partido, pero tampoco se mostró certero en los últimos metros.
Mientras, Albania estrellaba sus sueños en el palo, en otro gran ataque desde la derecha, ese carril que Evra sigue sin poder dominar. Memushaj cabeceó con ayuda de Sagna un buen centro que repelió la madera como si el karma quisiera mantener viva a Francia.
Y así fue. Entró Griezmann y posteriormente Gignac. Giroud se iba al banco tras toparse con el palo y evidenciar su desesperación. No era su día. Todo pintaba a que sería el día grande de Albania. Su primer punto en una Euricopa. Y ante Francia…
Hasta que llegó la zona Cesarini, ese punto del partido que Francia empieza a dominar bien en esta Eurocopa. Y delantero del Atlético se reivindicó con un testarazo de ‘nueve’ tras un centro de Rami que bien habría firmado Payet.
Locura en el Velodrome, que aún guardaba otra celebración más en la manga. Payet engrandeció su figura culminando a las mil maravillas un contragolpe en el descuento. Segundo gol y pase a octavos. Francia sonríe y sigue disfrutando con la flor que suele atribuirse a los campeones. A ver cuanto dura…
