París, Francia. (EFE) – Los anfitriones, comandados por un gran Griezmann y un mágico Payet, dan buena cuenta de la revelación del torneo y acaban con el milagro de Islandia.
Despertó de su sueño el país escandinavo en esta Eurocopa y lo hizo de golpe y porrazo, con un baño de realidad del equipo anfitrión, Francia, que penalizó cada error de los islandeses para firmar una goleada casi histórica en estos cuartos de final.
-Francia, inabordable-
Obligaron los galos a los islandeses a cambiar su planteamiento de salida y acabaron pagándolo. Islandia comenzó tocando y hasta disponiendo de alguna oportunidad y Francia, sin casi posesión, hizo el primero en un abrir y cerrar de ojos. A los 13 minutos, Giroud recibió un fantástico pase de Matuidi a la espalda de la defensa y definió de volea por debajo de las piernas de Halldórsson.
El guardameta islandés, seguro hasta la fecha, culminó una noche aciaga y acabó encajando 5 tantos que emborronaron la excelente Eurocopa que había disputado hasta estos cuartos de final. Sin embargo, el meta islandés poco pudo hacer para evitar el segundo, en el minuto 20. Griezmann sirvió un córner desde la esquina izquierda y Pogba se elevó majestuoso para cabecear a la red.
Tras el 2-0, Francia comenzó a tocar e Islandia vio cómo todos los kilómetros recorridos hasta la fecha se le echaban encima. Aun así, dispuso de un par de ocasiones en los pies de Bödvarsson, pero el paso de los minutos acabó por agrandar la diferencia entre ambas escuadras.
-Dos minutos letales-
Con ambos equipos pensando ya en el descanso, los dos últimos minutos de la primera mitad fueron decisivos para el devenir de la eliminatoria. Primero, en el 43, Payet se inventó un gol de la nada tras una dejada de Griezmann en la frontal y, menos de 120 segundos después, Griezmann aprovechó una maravillosa asistencia de Giroud sin tocar el balón para picarle a Hálldorsson el 4-0 en la acción que echaba el cierre a la primera mitad.
Islandia movió el árbol tras el descanso y renovó nombres y actitud, encontrando un juego del que había carecido en el primer acto. Cierto es que Francia también bajó algo el pistón, pero los islandeses se sintieron mucho más cómodos en una reanudación en la que terminaron imponiéndose a los galos.
Primero, Sigthorsson envió a la red el 4-1 tras una fantástica asistencia de Sigurdsson y, tras el gol de cabeza de Giroud (59) en una mala salida de Hálldorsson, Bjarnason echó el cierre al partido con el 5-2, anotado también de magnífico cabezazo (84) después de un buen servicio de Skúlason.
Entre medias, oportunidades para ambos equipos y una mano de Lloris que rivalizará con la de Buffon en el honorífico premio a la mejor parada de la Eurocopa.
Francia llega con las pilas cargadas a semifinales y espera una Alemania que disputó 30 minutos más y tendrá bastantes bajas. La Eurocopa descansa ahora hasta el miércoles para afrontar la fase decisiva de la misma. ¿Portugal, Gales, Francia o Alemania? Ya sólo puede quedar uno.
