Barcelona empata frente a Osasuna y empieza a ver lejos puestos de UCL
Pamplona, España. (Agencias) – El FC Barcelona volvió a decepcionar y sumó un nuevo tropiezo tras empatar a dos en El Sadar. Abde, autor de uno de los goles ‘culés’, fue la única luz en un equipo que debe mejorar mucho si quiere acabar esta temporada entre los cuatro primeros.
Ese honor lo tuvo un Nico que se estrenó como goleador con el Barcelona en un campo en el que ya anotaron su primer gol otras grandes promesas ‘culés’ como Ansu Fati o Ilaix Moriba.
El corpulento centrocampista destapó su faceta de llegador para anotar el 0-1 tras un gran balón al hueco por alto de Gavi. Una alegría que, por desgracia para los de Xavi, duró un suspiro.
Y es que la fragilidad defensiva del Barcelona hizo acto de presencia de inmediato. En la siguiente jugada al tanto de Nico, la zaga azulgrana, con tres centrales, hizo aguas y David García remató de cabeza absolutamente solo para llevar el delirio a las gradas de El Sadar, que era una auténtica caldera y reaccionó como tal tras la respuesta de su equipo.
El golpe fue duro para un Barça que tardó varios minutos en recuperarse. Lo hizo, claro está, a través de la posesión. El equipo de Xavi amasó el balón para tener el control y poco a poco se hizo con el dominio del partido. El mismo no generaba demasiados problemas a Sergio Herrera, salvo cuando Abde cogía el esférico.
La reanudación inició con un guion parecido, pero pronto hubo un minuto que cambió por completo el planteamiento del encuentro. En un ataque de Osasuna, la zaga ‘culé’ despejó y el balón, de manera involuntaria, tocó en la mano de Busquets.
El cuadro navarro reclamó penalti, pero el colegiado consideró que la acción era involuntaria. La jugada siguió y, tras una galopada y un centro de Dembélé al área, Abde, de volea, ponía un 1-2 que hizo entrar en erupción al estadio.
El tanto y la polémica incendiaron y enrabietaron a un Osasuna que, con 40 minutos por delante, atosigó al Barça en busca del empate. A base de empuje y centros laterales, el cuadro navarro incomodó a los hombres de Xavi Hernández, cuya fuerza menguaba con el paso de los minutos y se aferraban a alguna galopada esporádica de Dembélé.
Sin embargo, el empuje final de Osasuna inclinó el campo hacia el área de un Ter Stegen que debió ver que la tragedia podía llegar de nuevo en cualquier momento… y llegó. Al igual que en Vigo hace unas semanas, el miedo del Barça hizo acto de presencia cuando el choque se encaminaba a su final.
El verdugo fue un Chimy Ávila que, con un disparo raso en el 86′, hizo pagar la racanería de un equipo que quiso a jugar a que el duelo acabase tras el 1-2 y volvió a pegar un petardazo que, visto lo visto, tampoco debe suponer una gran sorpresa.
-Ficha del juego-
Resultado: Osasuna 2-2 Barcelona.
Jornada 17. – LaLiga.
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