San Pedro Sula, Honduras. (HSI) – La Federación Hondureña de Béisbol Aficionado, FEHBA, concedió este miércoles un permiso a los jugadores federados de béisbol, que son menores de 17 años, a jugar el V Torneo Abierto de Slowpitch Navideño pro la Fundación Hondureña para el Niño con Cáncer.
Con este comunicado, la FEHBA termina, de alguna manera, con el conflicto que se había generado en la realización de este evento con la participación de los chicos que quieren jugar con o contra, Mauricio Dubón, ya que algunos jugarán en su equipo, como otros lo harán en equipos rivales, respectivamente. La principal alegría de estos chicos es compartir con el pelotero referente y fuente de inspiración de muchos de los niños que juegan este deporte.
El evento, que no es oficial ni federado, no tenía porqué ser motivo de sanciones para los niños que quieren participar, ya que el torneo es navideño, no oficial, sin fines de lucro y al contrario, con fines benéficos, lo que viene a enseñar a nuestros jóvenes su responsabilidad social con aquellos que menos tienen o que padecen de alguna afección, como es en este caso. Entendemos que la ley existe y el artículo también y comprendemos el espíritu de la misma, pero siendo un evento anual, amistoso y sin fines de lucro, además de no federado ni oficial, el conflicto JAMÁS debió existir.
Lo único que como medio de comunicación no podemos dejar ir es el hecho que mencione «comentarios mal intencionados en las redes sociales sobre la participación de …». Hay que aclararle a la FEHBA que ellos debieron desde el inicio dar la cara. Pronunciarse sobre este artículo y que en efecto, inicialmente no daban permiso a los jugadores federados a jugar este torneo sin ser sancionados. Por lo anterior, ellos mismos generaron las criticas que han estado bien sustentadas. Hoy dan marcha atrás, lo cual aplaudimos pero como Federación, debieron dar la cara y pronunciarse antes. Hacerlo después de los reclamos después de los constantes reclamos hechos por padres, jugadores mismos, Medios de Comunicación, les quita mucha credibilidad.
Al final, ganan los niños y la Fundación Hondureña para el Niño con Cáncer que con su noble labor ayuda a otros niños que no tienen la misma posibilidad que tienen nuestros peloteros.
FEHBA: ¡Gracias totales!
