París, Francia. (EFE) – El atacante luso hace el primero de cabeza y sirve el segundo a Nani para llevar a su país a la final continental en un partido que sólo tuvo segunda parte.
Cristiano Ronaldo le ganó el duelo a Gareth Bale y Portugal se impuso a Gales en una primera semifinal de la Eurocopa que sólo tuvo 45 minutos de juego, pues ambas selecciones se dedicaron a dejar pasar los minutos en la primera mitad.
Santos y Coleman apostaron por resguardarse y, como suele suceder en estos casos, si ningún equipo propone un fútbol ofensivo no suele haber partido. Fue lo que sucedió en una aburrida primera mitad en la que Bale puso muchas ganas y Cristiano estuvo agazapado esperando su momento.
Los primeros 45 minutos finalizaron con únicamente dos ocasiones que reseñar, un chut cruzado de Joao Mario y un remate desde el punto de penalti de Bale tras jugada ensayada que rozó el palo de Rui Patrício.
Por lo demás, mucho miedo a perder de ambos conjuntos y un aburrimiento indigno de una semifinal europea.
-Gol decisivo-
El paso por los vestuarios sí que pareció cambiar algo el decorado. Portugal ofreció algo más y le puso al partido justo lo que necesitaba: un gol. Llegó en un saque de esquina, tras un gran centro de Guerreiro que remató, de manera imperial, Cristiano Ronaldo.
El luso aparecía en el mejor momento y encarrilaba el partido para los de Fernando Santos, pero aún dejaría su marca en el encuentro escasos minutos después, cuando se inventó un chut desde la frontal que Nani con mucho acierto empujó a la red, descolocando a Hennesey.
Gales, que con el 1-0 todavía soñaba con hacer la machada de remontar como ante Bélgica, acabó cambiando el esquema por completo e introduciendo delanteros a la vez que retiraba defensores tras el 2-0.
El partido se le puso muy cuesta arriba a la revelación de este parte del cuadro de la Eurocopa y, pese a acumular efectivos, Portugal sumó las mejores ocasiones para hacer el tercero, como en un lanzamiento de falta de Cristiano, un remate desde dentro del área de Danilo Pereira o un rechace defectuoso de Hennessey que Joao Mario envió directamente fuera.
En Gales, sólo Bale le puso corazón en un equipo que, desgraciadamente no pudo dar más de sí. Portugal está en la final 12 años después y espera poder tomar la revancha de un partido en el que eran los grandes favoritos pero acabaron perdiendo. Esta vez llegan como aspirantes ante Alemania o Francia. Tal vez esa falta de presión les beneficie para poder levantar por fin una Eurocopa.
