Con tres de Suárez, un Messi de Playstation y un Neymar malabarista, Barça golea al Celta

El Barça, espeso en la primera mitad y totalmente insuperable en la segunda, consiguió una victoria que pasará a los anales de la historia por la manera en que se produjo. Después de unos igualados primeros 45 minutos, el equipo azulgrana encontró la inspiración en la fantasía de la ‘msn’ tras la reanudación.

Y es que la primera mitad no se pareció en nada a la segunda. El Celta olvidó las bajas y plantó cara al Barcelona desde el pitido inicial. Con una formación ofensiva y un despliegue táctico acertadísimo, Berizzo consiguió que los suyos mantuvieran a raya al club catalán.

Sólo así se explica que el equipo vigués dispusiera de las primeras ocasiones, marradas por un Señé que cuajó un gran partido y por un Planas que se topó con Bravo. Los tres de arriba no conectaban y, con Neymar impreciso, tuvieron que ser Suárez y Messi los que despertaron al Barça.

El uruguayo, moviéndose como nunca entre líneas, fue una pesadilla para la defensa viguesa, que sólo fue capaz de pararle en la primera mitad con repetidas faltas. Una de ellas -la más lejana-, la convirtió Messi en una obra de arte. Parecía imposible que el argentino la colara desde esa distancia, pero Leo demostró por qué es actualmente el mejor lanzador del planeta.

Tras el 1-0, Luis Enrique imaginaba un partido plácido, pero el Barça se durmió. El Celta fue creciéndose y consiguió el empate en los últimos compases de la primera mitad, tras un penalti absurdo de Jordi Alba a Guidetti que el sueco transformó con mucho suspense.

El paso por los vestuarios reactivó la maquinaria azulgrana. Vaya usted a saber qué hablaron Messi, Neymar y Luis Suárez en el descanso, pero el equipo fue otro tras la reanudación. Nada más empezar la segunda mitad, Luis Suárez avisó con un remate al palo tras un regate fantasioso de Neymar dentro del área.

Después de un paradón de Sergio Álvarez a Iniesta, el Barcelona consiguió derribar la resistencia celtiña con un golazo. Pase ‘a lo Laudrup’ de Messi a Luis Suárez y el uruguayo que, con un toque, envió por encima del portero del Celta con facilidad.

Comenzaba entonces el recital del Barcelona, aunque en el Camp Nou aún tuvieron un par de sustos en sendos disparos de Wass que rozaron el 2-2. El 3-1 llegó tras una gran jugada de Messi en la frontal del área. El argentino sirvió el tanto en bandeja a Neymar, que dejó seco a Sergio Álvarez con un regate alucinante y, cuando ya cantaba el 3-1, veía cómo Mallo sacaba sobre la línea. Suárez, atento, remachaba en la línea el tercer tanto azulgrana.

Ese tanto acabó por despertar a los de Luis Enrique y la fantasía se apoderó en el Camp Nou. En apenas 5 minutos, Neymar se sacó una lambretta de la chistera por encima Señé que dejó boquiabierto al público del templo ‘culé’ y Messi fabricó un penalti con un autopase de otro tiempo ante Hugo Mallo.

Cuando parecía que ya se había visto lo mejor, el propio Messi y Suárez quisieron homenajear a Cruyff y dibujaron un penalti similar al que el ídolo azulgrana transformó en los 70 con el Ajax. El argentino pasó en corto al uruguayo, que entró en el área como una exhalación -se adelantó y el gol no debió subir al marcador- y batió a Sergio Álvarez.

Era el 4-1, pero en el Camp Nou aún tenían que disfrutar de dos nuevos tantos para enmarcar, ambos tras asistencia de Luis Suárez. El primero, lo convirtió Rakitic por encima del guardameta del Celta tras una brillante internada, y, el 6-1, era transformado por Neymar también de vaselina tras un fantástico cambio de orientación del uruguayo.

Alucinante segundo tiempo del líder de la Liga, que viajará el miércoles a Gijón para tratar de hacer aún más suya una Liga que parece decantada.