San Pedro Sula, Honduras. (HSI) – Cuando estamos atravesando por un resfriado o catarro y realizamos entrenamientos a alta intensidad, solo sumamos estrés al que ya provoca el resfriado y esto reducirá notablemente las defensas, pudiendo acabar en problemas mayores, pues la respiración se ve entorpecida.
Por otra parte; nuestro sistema defensivo está en jaque cuando llevamos a cabo entrenos exigentes con inadecuada alimentación e hidratación, falta de cantidad y calidad en el sueño; siendo una peligrosa combinación con la cual se tiende a debilitar mucho nuestro sistema inmunitario. Nadie se siente bien cuando tiene un catarro, principalmente cuando estos implican congestiones y dolores de cabeza, Thomas Weidner, director de Laboratorios en Investigación sobre Entrenamientos Atléticos y Profesional de la Medicina Deportiva afirma: “en función de la localización de los síntomas del resfriado debemos decidir si hacer o no ejercicio, entrenar de forma liviana puede hasta estar indicado para personas con molestias del cuello hacía arriba, si las molestias las tenemos en pulmones y resto del cuerpo quizás el deporte no es tan conveniente”.
En este sentido un grupo de médicos de la Universidad de Ball State en Indiana afirman; “está comprobado que el ejercicio físico estimula el sistema inmunitario del deportista, por tanto ejercitarse de forma moderada-suave podría ayudar a un mejor funcionamiento de nuestras defensas frente a los virus que nos están atacando”. Pero, y si además de dolor de garganta, estornudos y demás, tenemos malestar de cuerpo e incluso fiebre mejor descansemos, eso es síntoma que la situación se ha complicado un poco y el organismo está luchando contra una infección, si nuestro cuerpo se está desgastando con la lucha frente a una infección, para nada tiene sentido someterle a otra carga de trabajo. Además, según los entendidos en la materia entrenar con fiebre podría implicar desarrollar una Miocarditis, una infección del músculo cardiaco que podría debilitarlo.
Vale aclarar que entrenar bajo la lluvia y en condiciones de frío no implica que vayamos a coger un catarro, es cierto que exponer a los pulmones al frío aire que respiramos cuando corremos en estas condiciones climáticas tiene su riesgo en caso que el sistema defensivo no esté sólido, pero lo más importante de todo para no resfriarnos es no ponernos en contacto directo con el virus, es decir con alguien resfriado, por lo que es útil lavarse las manos para prevenir su transmisión, sobretodo después de toser, estornudar o tratar con una persona enferma.
Algunas recomendaciones si estás resfriado son: 1. Hidratación: El agua ayudará a diluir las secreciones bronquiales y de esa manera disminuirá las molestias, te sugiero ingerir bebidas cítricas hechas por ti. 2. Realiza entrenamiento cruzado: Si presentas tos lo mejor es no correr, pero eso no quiere decir que no puedas hacer sesiones de estiramientos, trabajo en el gimnasio o ejercicios excéntricos. 3. Vigila tu temperatura corporal. En caso que tengas una competición a la vuelta; lo ideal será que visites a un profesional de la Medicina Deportiva para que te evalúe e indique si te es conveniente o no acudir a la misma.
