San Pedro Sula, Honduras. | HSI |
Por Víctor Tábora
El 2015 está a punto de finalizar y con ello damos paso al año 2016, año de los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro en Brasil.
En esta ocasión recordaremos un icono de una disciplina no tan popular en este lado del planeta. El fútbol es el deporte rey en estas laderas del nuevo continente, sin embargo, en cuanto a logros, en Costa Rica no hay otro momento más sublime que cuando Claudia Poll se alzaba con la medalla de oro en los 200 Mts libres en las Olimpiadas de Atlanta 96. Ese momento significó la primera y única medalla de oro de Costa Rica en una olimpiada, su hermana Sylvia había logrado plata en la misma disciplina en Seúl 88.
Nacidas en Managua, Nicaragua pero de ascendencia alemana, su padre Bernardo Poll y su madre Thea Ahrens se mudaron a Costa Rica en busca de mejores condiciones de vida, debido al terremoto que azotó la capital nicaragüense en 1972. Siendo niñas sus progenitores las inscriben en el club de natación Cariari en Alajuela, Costa Rica, donde Claudia comienza a escribir la más gloriosa y grande historia en este país centroamericano.
Claudia Poll ha significado ser lo más glorioso para el deporte «tico». Sus primeras exhibiciones en competencias fueron en 1989 en el campeonato Centroamericano y del Caribe de Natación CCCAN en Caracas, Venezuela, donde logró sus primeros éxitos. Aun así, no logra clasificarse a los juegos olímpicos de Barcelona 1992. En el mundial de natación en Roma 94, logró quedarse con 2 bronces en 200 y 400 metros que le valieron para clasificarse a los Juegos Olímpicos de Atlanta 96, escenario donde ella lograría llegar a la cúspide de su carrera al proclamarse campeona olímpica y por ende la medalla de oro en 200 metros tras vencer a sus «paisanas», las alemanas Franziska Van Almsick y Dagmar Hase en una espectacular final. Otro de sus logros personales más significativos llegó en 1997 tras ser considerada la mejor nadadora del mundo de esta disciplina.
Los éxitos continuaron en 1998 en el mundial celebrado en Perth, Australia donde la costarricense ganó la competencia de los 200 Mts con récord incluido con un tiempo de 1:58,90. No todo era felicidad en Claudia, después de dicha competencia sufre una lesión en la espalda que por poco la deja fuera de los juegos Sidney 2000. La «sirena» sin embargo logra recuperarse y se adjudica 2 medallas de bronce en 200 y 400 Mts.
Luego vino una una sanción en el 2002 por dar positivo un control antidoping con la sustancia norandrosterona. Fue suspendida por cuatro años, pero su defensa logro reducirle a dos, con lo cual le alcanza para participar en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, competencia en la que no le fue de nada bien, pues no logró pasar las series iniciales para disputar un lugar por el pódium.
En el 2006 anunció su retiro de las piscinas donde deja un legado fabuloso para el deporte latinoamericano y en especial para el costarricense con un balance de 742 pruebas, 135 torneos en los que acumulo 699 trofeos y 50 medallas, llego a batir 144 récords entre nacionales, centroamericanos, latinoamericanos y mundiales.
Entre sus logros personales como deportistas y más significativas son:
- Declarada mejor deportista del siglo 20 en Costa Rica por el Diario La Nación de Costa Rica.
- Ciudadana de honor de Costa Rica, otorgada por la asamblea legislativa en 1996.
- Deportista de Costa Rica en los años 1993, 1994, 1995, 1995, 1996, 1997, 1998, 1999 y 2000.
- Mejor atleta latinoamericana 1995, 1996 y 1997 por la agencia de prensa latina.
