Atlético y Villarreal se anulan mutuamente y le ponen la Liga en bandeja al Barça

Las dos mejores defensas de España demostraron por qué lo son y fueron las grandes protagonistas del partido de la jornada en el Calderón.

El Atlético se dejó la piel por conseguir una victoria decisiva en sus aspiraciones ligueras, pero se encontró con un Villarreal sólido que incluso tuvo las mejores ocasiones del partido a la contra.

Paso atrás de los ‘colchoneros’ en la lucha por el campeonato, y parece que ahora se tendrán que centrar en la tan repetida lucha por la tercera plaza.

El primer tiempo volvió a poner de manifiesto la incapacidad del Atlético de Madrid para hacer gol. El Villarreal le regaló el balón a los de Simeone, pero los rojiblancos no supieron qué hacer con él durante gran parte de los primeros 45 minutos.

Tampoco hizo mucho más el Villarreal, que aún así se permitió el lujo de reclamar un penalti de Saúl a Samu Castillejo y de poder decir que había rematado más que los del ‘Cholo’, aunque fuera gracias a dos disparos muy altos de Rukavina y Mario y a una volea en un saque de esquina de Bonera que acabó siendo la más clara del partido.

El italiano aprovechó un error en la marca de Godín -extraño en él- y remató de volea rozando el larguero de Oblak, en la vez que más cerca se vio al esloveno en todo el partido.

No se vio mucho más a Areola, que se mostró muy seguro en los balones aéreos, pero que sólo pasó por reales apuros en la primera parte en un centro desde la banda de Juanfran que Griezmann no pudo embocar a portería.

El Atlético se hartó de sacar córners, también en la segunda mitad, pero no consiguió sacar fruto de ninguno de ellos. Su ocasión más clara la generó de la nada Correa, pero el intento de vaselina del argentino después de un regate en el área lo desvió con facilidad a córner el portero del Villarreal.

Y, aparte de dos contras de Bakambu -disparó muy forzado- y Denis Suárez -se durmió en el área-, no hubo mucho más hasta el descuento. En él, la tuvo Vietto, que se escoró demasiado y disparó al lateral, y la tuvo Adrián, que se durmió y dejó que Savic se rehiciera y enviara a córner.

Mucho antes, Simeone había comenzado a pensar en la Champions y en el derbi -sustituyó a Griezmann por Óliver-, dando por bueno el empate y quizás intentando reafirmarse en que la verdadera lucha del equipo rojiblanco es la de las plazas que dan acceso a Champions League.

Más cabreado con lo visto acabó Marcelino, pues, aunque el empate es bueno, tendrá difícil disponer de una ocasión parecida para puntuar en el Calderón.

Y quien se aprovecha de todo es, una jornada más, el Barcelona, que ya está 8 puntos por encima de los rojiblancos y 9 del Madrid. Salvo descalabro, la Liga es suya.

En el transcurso del segundo tiempo, Diego Simeone sustituyó a Ángel Correa y Antoine Griezmann, que dejaron su lugar a Luciano Vietto y Oliver Torres, sin crear demasiado peligro, mientras que el Villarreal construyó contragolpes que llevaron intranquilidad al Atlético.

«Nosotros vamos a seguir trabajando, partido a partido. Ahora la Champions, luego el Bernabéu, a tratar de hacer un buen partido y a pelear por perseguir al Barça. Vamos a luchar por estar arriba», afirmó el centrocampista del Atlético, Koke Resurrección.