Bilbao, España. (AGE) – En una de sus noches más decepcionantes de la temporada, el Madrid no aprovechó el tropezón del líder y fue incapaz de vencer al deprimido Athletic, un equipo menor hoy por hoy, angustiado por la clasificación y por el mazazo de la Copa ante el Formentera.
Además, los blancos sufrieron la expulsión de Sergio Ramos, que tuvo que abandonar el terreno de juego en el minuto 85 después de enseñarle el codo a Aduriz en una disputa aérea. Son ya 25 las expulsiones del defensa andaluz con el Real Madrid, 19 en el campeonato doméstico, más que ningún otro futbolista de Primera División.
«Hemos jugado muy bien y hemos tenido muchas oportunidades, pero esto es fútbol: si la pelota no quiere entrar…», declaró Casemiro al término del partido en Bilbao. «La gente debe valorar el partido que hemos hecho. Este es un campo muy difícil y hemos dominado todo el partido». ahondó el centrocampista brasileño.
Conforme se fueron consumiendo los minutos y especialmente tras la lesión de Iturraspe, el cronómetro de este equipo, el Real Madrid fue subiendo líneas, apropiándose en exclusiva del esférico y embotellando al equipo de Ziganda en su área. Fueron momentos difíciles para el Athletic, pero mantuvo siempre la concentración y el buen hacer.
Su mejor oportunidad fue una que no existió, pues el árbitro frenó una acción en la que Cristiano se plantaba frente a Kepa por una patada de Etxeita a Modric. El portugués, no obstante, parecía estar en fuera de juego. Tras la expulsión de Ramos, el Madrid se dio por vencido y acabó achicando agua de su propia portería. Para entonces, ya sabía que había perdido una golosa oportunidad.
Mientras, el Athletic sigue instalando en la zona peligrosa de la tabla. El punto es valioso para los vizcaínos, pero ocupan el 15º puesto de la clasificación, con 14 puntos. De los 14 partidos que han jugado, los vascos solo han conseguido salir victoriosos en tres ocasiones.
