Los «Diablos Rojos» no notaron la ausencia por lesión del centrocampista del Manchester City Kevin De Bruyne y dominaron a los bosnios de inicio a fin, sumando la primera victoria como anfitriones para el seleccionador Roberto «Bob» Martínez.El resultado sitúa a Bélgica a la cabeza del grupo H, con dos victorias en dos partidos (Chipre y Bosnia y Herzegovina) y empatada a puntos con Grecia, que doblegó estas noche a Chipre por 2-0.
Los locales se plantaron en el terreno de juego del estadio Rey Balduino de Bruselas con un 4-2-3-1 inicial, que pronto se transformó en una defensa de tres, con la lesión en el minuto 20 de Jordan Lukaku.
El defensa del Lazio fue sustituido por Laurent Ciman y provocó que Jan Vertonghen modificara su posición para ocupar la banda izquierda en la zaga, en un dibujo que completó Toby Alderweireld.
Los de Mécha Bazdarevic salieron sin miedo, pero pronto entregaron la batuta del partido a los «Diablos Rojos», que sumaron su tanto número 500 en competición oficial con un autogol del bosnio Spahic, que infelizmente remató en su portería un centro de Thomas Meunier en una jugada iniciada por Yannick Carrasco.
Tan solo dos minutos después, Bélgica subió el segundo al marcador en un gesto de gran factura técnica del delantero del Chelsea Eden Hazard, que aprovechó un pase en profundidad de Dries Mertens y dribló al guardameta Asmir Begovic.
La selección belga se impuso a Bosnia Herzegovina en el estadio Rey Balduino de Bruselas. Foto AFP/J. Thys Sin cambios al descanso en ninguno de los dos equipos, Bélgica mantuvo la autoridad sobre el campo en el arranque de la segunda parte, con intentonas fallidas de Hazard, Romelu Lukaku hasta que los «Diablos Rojos» subieron el tercero al marcador tras un saque de esquina.
Maarten Martens botó un balón al primer palo en el minuto 59 que Alderweireld remató de espuela con inusual clase para un defensa central.
Golpe de autoridad de Bélgica que goleó a Bosnia Cinco minutos después Lukaku tuvo en sus botas el tercero al contraataque, pero falló a puerta vacía tras recibir un cómodo balón que le regaló el centrocampista del Atlético de Madrid Yannick Carrasco.
Pero el delantero del Everton se resarció en el minuto 79, cuando recibió un balón en la esquina de la frontal del área, caracoleó entre tres defensores y lanzó un disparo que batió por alto a Begovic, subiendo el cuarto al marcador en una noche poco inspirada del portero suplente del Chelsea.
Instantes después Lukaku recibió una ovación al ser sustituido por Christian Benteke.
Los belgas, que hace un mes salieron abroncados de lo que antes se conocía como el Estadio de Heysel en el estreno de Martínez como seleccionador en un amistoso contra España(0-2), recuperaron la confianza de su público en una noche donde la nota amable la puso la el defensa central belga Nicolas Lombaerts, que abandonó la concentración para asistir al nacimiento de su hijo.
