Arizona, Estados Unidos. (HSI) – Mauricio Dubón sumó un nuevo hit para mantener el paso conectando al menos un sencillo en 10 de los últimos 12 juegos en los que ha jugado de titular. Los Giants vencieron por segundo día consecutivo a los Diamondbacks en casa de estos. 4-1 y ganan la serie.
Con una fenomenal actuación del dominicano Johnny Cueto lanzando 5 ¹⁄³ entradas, aunque permitiendo un cuadrangular al dominicano Starling Marte en la quinta entrada con un out lo cual ocasionó que sin pensarlo su manager, Gabe Kapler lo relevara por Walker que terminó los dos tercios de la entrada que faltaba. El resto lo hizo los relevos que se mostraron bien y bajo control.
Con un doblete de oro del espigado Evan Longoria que hizo que la brecha se abriera para que los Giants ganaran el noveno de sus ultimos doce juegos, racha que los mantiene en la contienda por los puestos de playoffs con un juego de diferencia con el segundo comodín que está muy peleado con Miami, San Luis, Padres de San Diego y los Giants que se ubican empatados en la cuarta posición del comodín pero muy cerca.
Por primera vez se ve que los Giants están siendo un equipo perseverante y mas con Mauricio Dubón en racha de bateo, lo que antes era criticado, hoy es uno de sus fuertes y sigue metiendo miedo a los pitchers rivales. Se sigue dando gusto con cada turno exitoso que tiene al bate y ayudando con todo su poderío a la ofensiva. Su juego defensivo jamás ha estado mas que confirmado como uno de los mejores de las Grandes Ligas.
Lo que aumenta su promedio en lo que va de la temporada y el equipo ayudó a Cueto que obtuvo un nuevo triunfo. El pitcher más sólido de los Gigantes.
Aguantando los Giants su buen paso para lo que se viene, pensamos será una recta final de alarido en que los de San Francisco buscan aumentar sus posibilidades y finalmente tener cita con la postemporada.
El cierre de la temporada regular será una lucha en donde el equipo que baje los brazos, se quedará viendo por la televisión los playoffs en donde muchos quieren ver a Dubón y sus Giants.
Un comentario