Atlanta, Georgia. | HSI | Elexa Bahr sigue su camino de crecimiento continuo en el fútbol. Lo lleva en la sangre. Como dicen pora allí, «Hijo de tigre nace rayado».
Nuestra compatriota ha sido sujeto de muchos reportajes y sin duda todos muy merecidos por esta chica que en pocos meses estará jugando a nivel universitario, un fútbol mas difícil, exigente y competitivo del que ahora realiza
El portal de GPS (Gwinnett Prep Sports) ha hecho un bello reportaje de la catracha goleadora. Les dejamos las partes mas importantes de la entrevista y trabajo hecho con la futbolista nacida en Estados Unidos pero que viste la H.
La jugadora del ultimo año de la Buford High School, Elexa Bahr, realmente no tuvo opciones en que deporte jugar. Tampoco sus más jóvenes hermanos.
En el hogar de los Bahr, una vez que puedes pararte por ti mismo y andar, el siguiente paso es aprender cómo «driblar» con el balón de fútbol.
“Hacemos bromas que nosotros hemos nacido ya jugando futbol,” dijo Elexa. “Tan pronto podemos caminar, comenzamos a jugar fútbol, y lo amamos desde entonces”, agregó.
El patriarca de la familia, Alex Bahr, nació en Tela, Honduras, y tuvo una carrera profesional de 16 años entre Honduras, México y Estados Unidos, incluyendo jugar con los Atlanta Silverbacks. Ahora él está en su tercera temporada como asistente en el equipo de varones de Buford.
Mientras Elexa juega para Buford en la Asociación Club Gwinnett Soccer 98, su hermano mas joven de 15 años, Alexander, juega para el Georgia United y su hermanita de de 11 años para GSA también. Eso significa que Alex y su esposa, Vickie, están yendo con frecuencia a diferentes direcciones cada noche de la semana e incluso fines de semana por los eventos futbolísticos.
“Para mi es como un sueño hecho realidad” Alex Bahr dijo. “Después de jugar profesional y ahora entrenando por 11 años es maravilloso. Solo puedo decir gracias a Dios. Somos unos bendecidos. No es solamente por Elexa, es también por mis otros dos hijos que están jugando a un nivel muy alto. Somos una familia de fútbol. De las muy ocupadas” siguió diciendo.
Como la mayor de sus hijos, Elexa, está trabajando en dejar una barra de nivel alto para sus otros hijos. En Buford ella (Elexa) es una jugadora titular por cuatro años y ha firmado ya para estudiar y jugar con la Universidad de South Carolina.
Su carrera en Buford ha sido impresionante pero su momento mas memorable fue cuando en diciembre ella jugó con el equipo nacional de Honduras en el torneo regional U-20 de la CONCACAF. “Fue asombroso, una experiencia como ninguna otra. Realmente lo fue”, dijo Elexa.
A pesar que ella ha vivido en el área metropolitana de Atlanta su vida entera, gracias a la gestión de su padre y de amigos hondureños, ella pudo jugar para Honduras.
Ella escogió jugar para el país de su padre con la esperanza de llamar la atención de los Estados Unidos pues los jugadores no están bloqueados de jugar para un país hasta que lo hacen con una selección adulta de forma internacional. Bahr logró mas que solo captar la atención de los Estados Unidos en este torneo jugado en Honduras.
En la etapa de grupos, ella marcó dos veces en el empate 2-2 contra Jamaica y lo hizo otra vez en el triunfo 2-0 sobre Trinidad and Tobago. Honduras finalizó cuarto en este torneo.
Para Alex, quien jamás jugó con su selección nacional, la experiencia de ver su hija jugar con la selección de su país fue muy emocionante.
“Wow. Fue una gran y emocionante momento para mi porque yo soy de Honduras y no pude vestir la camisa nacional,” dijo él. “Ella lo hizo por mi prácticamente. Eso es asombroso. Ese momento permanecerá en nuestros recuerdos y corazones por siempre». Las lágrimas se hacen presentes en los ojos de Alex.
El futuro internacional de Elexa Bahr no está decidido aún. Mientras tanto está abierta para jugar con Honduras, pero mantiene un ojo puesto en el equipo de los Estados Unidos.
Por ahora, su enfoque es finalizar su temporada con Buford. Como jugadora de onceavo grado ella ayudó a que las Lobas alcanzaran las semifinales estatales AAA y ella espera ayudar a llegar aún mas lejos esta temporada.
“Estar en el campeonato estatal significa todo, pero al mismo tiempo no tanto,” dijo ella. “Eso porque me siento que siendo parte de un equipo como Buford tú realmente aprendes lo que es una familia, te desarrollas y creces como un equipo. Sin duda es una gran cosa tener un anillo de los estatales pero ser parte de este equipo ya es grandioso por sí mismo”, finalizó diciendo Elexa.
Tomado de www.gwinnettprepsports.com/Paul Thomas
