Aquiles, un gato blanco y sordo, pronosticador oficial del Mundial 2018
Moscú, Rusia. (AFP) – Aquiles, un gato blanco y sordo que vive en el Museo del Hermitage de San Petersburgo, fue elegido este lunes como pronosticador oficial de la Copa del Mundo de Rusia (14 junio-15 julio de 2018).
«Celebraremos una conferencia de prensa especial y Aquiles tendrá un pase oficial de aficionado», indicó la jefa de prensa del famoso museo, Mary Khaltunen, a la agencia de prensa R-Sport.
A raíz del famoso Pulpo Paul, que predijo los siete resultados de Alemania en el Mundial de Sudáfrica 2010, incluida la derrota contra España en semifinales de los mismos anfitriones, las mascotas convertidas en pronosticadoras se han convertido en un clásico de los grandes torneos.
Según R-Sport el Hermitage está lleno de gatos muy aficionados al fútbol. Sus antepasados fueron introducidos en el lugar por Pedro el Grande en el siglo XVII, cuando el Zar lo convirtió en su Palacio de Invierno.
En la actualidad, cerca de 70 gatos protegen el museo de los ratones y el edificio cuenta con un equipo dirigido por Anna Kondratyeva, que explicó que Aquiles se tomó un año sabático y «ganó peso» después de haberse encontrado con Alemania, el equipo que el año pasado conquistó la Copa de las Confederaciones.
Aquiles pesa actualmente 4,7 kilos y hará sus predicciones eligiendo entre varios bols de comida claramente identificados. «Es sordo de nacimiento, lo que explica su nivel de intuición», añadió R-Sport.
La historia de los felinos del Hermitage hunde raíces en el siglo 18, en sus comienzos el emperador Pedro I instaló en el Palacio de Invierno a un gato que trajo de Holanda, más tarde la emperatriz Isabel I de Rusia emitió un decreto sobre el suministro de gatos a la corte, después Catalina la Grande, fundadora del Hermitage, otorgó a los felinos el estatus de guardianes de las galerías de pintura del museo.
La tradición de tener gatos en esta pinacoteca se infringió solo en una ocasión, durante el sitio de Leningrado (actual San Petersburgo), después de la II Guerra Mundial fue organizado un servicio de mantenimiento del personal felino en el Hermitage, donde actualmente habitan cerca de 50 gatos y gatas.