San Pedro Sula, Honduras. (HSI) – Honduras tiene nuevamente una cita con la historia. Esa de la grande que hemos escrito en anteriores ocasiones pero nunca en un escenario como los Juegos Olímpicos, el Maracaná y ante el país mas laureado del fútbol, Brasil y todo en un solo combo.
Uruguay en el Mundial de 1950 dio origen al «Maracanazo», o la sorprendente eliminación de Brasil en cuartos de final de la Copa América de 2001 a manos de una selección hondureña que ganó por 2-0 con goles de Saúl Martínez, han servido de inspiración a Jorge Luis Pinto para enseñar a sus jóvenes jugadores que es posible la victoria.
«Si yo pregunto si por la cabeza de algún brasileño pasó que podrían perder como perdieron ante Alemania en el Mundial, la respuesta sería que no», manifestó Pinto para significar que sus jugadores están preparados mental y físicamente para afrontar el desafío.
Incluso recordó otra sorpresa del fútbol vinculada con su país, Colombia que, contra todos los pronósticos, en 1993 vapuleó a Argentina por 0-5 en Buenos Aires.
«Respetamos profundamente a Brasil pero las camisetas ya no asustan, en los estadios pueden gritar pero los hinchas no juegan. Por eso creemos que podemos hacer un partido lindísimo», expresó el cafetero.
Walter Urbina, uno de los grandes de Honduras manejando datos históricos lo deja claro: «Indudablemente que el partido ante Brasil es el encuentro más importante en la historia del fútbol hondureño y es que nos hemos jugado clasificaciones a Copas del Mundo o le hemos ganado al “Scratch” en la Copa América y en Juegos Panamericanos pero jamás hemos alcanzado una instancia como la que nos ocupa, las semifinales de los Juegos Olímpicos y es que si obtenemos la victoria, nos convertiremos en una de las dos selecciones que disputará la supremacía del planeta en categoría sub-23 y aseguraríamos la primera medalla para Honduras en 120 años de olimpismo y tras doce incursiones catrachas en la principal fiesta deportiva del orbe» dijo Urbina.
Jorge Pinto agregó y deja muy claro: «Es que no sabemos si vamos a poder volver a jugar un día aquí», añadió el exseleccionador de Colombia y Costa Rica durante una conferencia de prensa en el estadio Maracaná.
El hombre que llevó a Costa Rica a los cuartos de final del Mundial de Brasil, un hecho sin antecedentes en su historia futbolística de ese país centroamericano, dijo ver en el joven equipo de Honduras algo de la selección que entrenó hasta 2014.
«Honduras tiene algo de Costa Rica, a pesar de que son muy jóvenes y de que muchos no han salido de su país, aprenden mucho y muy rápido. Son como unos universitarios del fútbol. Ojalá mañana podamos demostrarlo», puntualizó.
Honduras ya hizo historia y da un paso mas a la búsqueda de la excelencia, sin embargo, el gran momento está frente a unos chicos que ya admitió su técnico sienten el desgaste de la competición y es posible que introduzca cambios, aunque aclaró: «no hay que parar, hay que seguir, y al hacerlo hay que dar todo el esfuerzo».
