Dortmund, Alemania. (Agencias) – El Borussia Dortmund venció 3-2 al Bayern Múnich, que no tuvo en el campo a James Rodríguez, en una nueva edición de Der Klassiker en el Signal Iduna Park. Por primera vez en varias temporadas, el juego más importante de la Bundesliga tomó a los muniqueses fuera de la punta y perdiendo con su clásico rival.
La previa dejó varias noticias sorprendentes. La baja de Bürki por lesión obligó a Favre a meter a Hitz. Sorprendió el ex del Niza dando entrada también a Weigl en lugar de Delaney y al dejar fuera a Paco Alcácer para jugar con Götze de ‘falso 9’. Kovac, por su parte, optó por repetir el once que ganó en Champions al AEK (2-0). James Rodríguez, según Hasan Salihamidzic, se quedó fuera al no estar «plenamente en forma», pero su suplencia no hace más que alimentar los rumores de su mala relación con su nuevo entrenador.
Marcó Lewandowski. El polaco les tiene tomada la medida a sus ex: esta vez aprovechó un centro medido de Gnabry en el 26′ para ganar la espalda a Zagadou y cabecear a placer.
La alegría le duró poco al Bayern. Nada más salir del descanso, en el 48′, empató el Dortmund gracias a un penalti de Neuer sobre Reus. El capitán del BVB no perdonó desde los 11 metros.
Lewandowski, sin embargo, no había dicho su última palabra. El 1-2, en el 52′, llegó tras una gran combinación del Bayern entre Müller, Gnabry y Kimmich que ‘Lewy’ remató a placer. En los últimos cuatro partidos les ha marcado ocho goles a sus excompañeros.
Tanto perdonó el Dortmund que parecía destinado a caer derrotado. Reus, en el 59′, vio cómo Kimmich le sacaba un disparo bajo palos y Alcácer, nada más salir, en el 62′, vivió una experiencia similar. Recibió el pase de la muerte de Sancho y Boateng evitó que el ‘9’ español marcara a puerta vacía.
La venganza de Reus y Alcácer llegó pronto. Reus, en el 67′, voleó de forma magistral un centro de Piszczek desde la derecha. Era el 2-2. El éxtasis en el Signal Iduna Park aún estaba por llegar. Recibió Paco Alcácer un pase de Witsel que le dejó mano a mano con Neuer y el valenciano tuvo la templanza necesaria para tumbar al internacional alemán y poner el 3-2 en el 73′.
Fiesta en Dortmund y sin duda semana de reflexiones en Múnich, donde Niko Kovac la está viendo negras y en todos los frentes rindiendo con el mínimo.
